Tomás, muchacho del tablón en la cancha todo nacional y popular, desarmado por no entender un pomo de lo que la gringa le preguntó, quedó mirando al cielo raso mientras revoleaba los ojitos.

Menos mal para el milonguero, parada al lado la tuvo a Mónica, doctora en medicina y mujer muy viajada ella… Le hizo señas a la texana para que le pasara la pregunta a la doctora que, después de escuchar, le tradujo: -te pregunta –le dice a Tomás- qué orquesta es la mejor de todas-.

Arrancó la tercera pieza de Di Sarli y la doctora piantó de la conversación para seguir bailando. Tomás, ahora en terreno seguro, se agrandó y le propinó a la gringa la respuesta que siempre tiene en la punta de la lengua para cada vez que le preguntan más o menos lo mismo:

-Anotá piba: Juan D´Arienzo, es el compás del tango; Osvaldo Pugliese, es la pausa del tango; Carlos Di Sarli, es la exquisitez en el tango y Aníbal Troilo, es la esencia del tango, ahí tenés casi todo ¿entendiste?- remató Tomás.

La yankee, en su turno de no entender nada y sin saber lo que es un pomo, calculó que por la extensión de la respuesta el argentinito algo sabe.

Lástima que no tuvo al lado ningún inglés para que le tradujera una muy buena respuesta que resume bastante bien al tango y que la iba a hacer pensar. Y sin mirar el cielo raso ni revolear los ojos, la gringa se abrazó conforme a ese argentinito para seguir bailando el tango.